Santander cerrará cuatro oficinas en el Reino Unido e impulsará el trabajo flexible

Banco Santander SA está cerrando cuatro oficinas en el Reino Unido como parte de un cambio hacia un trabajo más flexible.

El banco cerrará sus oficinas de Bootle, Newcastle, London Portman House y Manchester Deansgate para fines de 2021, dijo la entidad financiera en un comunicado el jueves. También ocupará menos espacio en cuatro sitios, incluidas sus oficinas de Ludgate Hill y Triton Square en Londres.

Milton Keynes, donde el banco está invirtiendo 150 millones de libras (US$ 205 millones) en un nuevo campus, se convertirá en la sede del Reino Unido, junto con las bases en Belfast, Bradford, Glasgow, Londres y Sheffield.

"La pandemia ha acelerado la tendencia existente hacia un trabajo más flexible", dijo Nathan Bostock, director ejecutivo de Santander Reino Unido. A unos 5.000 empleados afectados por los cambios se les ofrecerán nuevos arreglos que combinen el trabajo desde casa con el acceso a espacios locales.

Las empresas están lidiando con el lugar de trabajo posterior al Covid-19, y algunos bancos, como HSBC Holdings, buscan recortar sus bienes raíces a medida que el personal rechaza un regreso generalizado a la vida de oficina. La sociedad de construcción Nationwide ha dicho a sus 13.000 empleados de oficinas que pueden trabajar desde cualquier lugar del país.

Desde el brote del coronavirus, el 85% del personal de la oficina de Santander se ha quedado en casa, según el banco, que dijo que todo el personal de la oficina continuará trabajando a distancia hasta al menos el 21 de junio, lo que refleja la intención del gobierno para ayudar a controlar la pandemia.

Cierres de sucursales

El prestamista español también dijo el jueves que cerrará una quinta parte de sus sucursales en el Reino Unido, ya que la tecnología y el trabajo remoto continúan revolucionando la banca minorista tradicional.

Las 111 sucursales cerrarán a fines de agosto, dejando al prestamista con una red de 452 locales minoristas. Muchos prestamistas están revisando su ya menguante presencia en las ciudades británicas después de que la pandemia empujara a más clientes a adoptar servicios en línea.